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domingo, 12 de marzo de 2017

La pesca furtiva en A Frouxeira

  Cuando leí el Estudio de Conservación de la laguna elaborado por la Xunta comprendí que estaba hecho por personas que no habían pisado el lago en su vida. Y es que algunos de los problemas diarios que padece el espacio protegido no merecían ni una sola línea en aquel tocho de casi 200 páginas.

    Una de esas amenazas presentes cada día es la pesca furtiva, que mencioné en las alegaciones que presentamos desde la SGHN. Me refiero a la pesca con aparejos como nasas o redes, pues la pesca deportiva con caña está permitida. Y no me preocupa sólo el impacto directo en las comunidades piscícolas (son apenas dos furtivos) sino los "daños colaterales". Me refiero al peligro que las redes de "trasmallo" tienen para otra fauna vertebrada como crías de nutria o aves buceadoras que podrían quedar atrapadas. De hecho hace años encontré un cachorro de Nutria muerto, quizá por ahogamiento, en un lugar donde actuaban los furtivos. Además tengo la convicción de que fueron ellos los autores de la quema con gasolina de los tres observatorios la década pasada. Algo imposible de demostrar en este país de la omertá, donde nadie sabe nada de nadie, mucho menos habiendo fuego por el medio.

   Esta mañana me encontraba esto en la orilla:

Nasa prohibida en la laguna con cebo reciente

  Una nasa con dos cebos dentro, probablemente para captura de la Anguila. Por el estado que mostraba la carne podía haber sido preparada hace unos días o quizá una semana. Para ello los furtivos, de sobra conocidos por toda la parroquia y por la Guardia Civil, actúan siempre de noche, aunque a veces se retrasan hasta el amanecer y ya los tengo cogido in fraganti.

  Inmediatamente llamé al SEPRONA, pero no me cogieron el teléfono ni en la central ni en la oficina de Pontedeume (algo a lo que ya me he acostumbrado). Llamé entonces al 062, urgencias de la Guardia Civil, pero allí me remitían a la Consellería de Pesca, aunque les intenté explicar que no era costa marina y que además era un espacio protegido. Entonces fuí al cuartelillo de Valdoviño, que estaba cerrado a cal y canto, igual que la oficina de la Poli Local del Ayuntamiento.
   Llegados a este punto llamé a Eloi Saavedra, presidente de la Sociedade de Caza e Pesca do Xuvia y seguidor de este blog, que me puso en contacto con la Guardería de Pesca, con quienes pude finalmente hablar. Un agente se comprometió a ir a recoger la nasa así como a inspeccionar la zona por si hubiese más. Como yo me tenía que marchar cogí la nasa y la "guardé" en un contenedor de basura hasta que llegase el agente.

   En fin, muchas veces oigo o leo cosas sobre la laguna que me hacen preguntar de qué planeta viene aquella gente que lo dice o de qué mundo hablan. El asunto de la desecación ficticia (que se demostró absolutamente falso) ocupó páginas y páginas de la prensa, minutos de televisón, páginas web de asociaciones ecologistas y múltiples denuncias durante varios años. Mientras tanto el gravísimo problema que tenemos con los perros sueltos corriendo a diario dentro del espacio protegido apenas es mencionado y no existe un mínimo control policial para obligar siquiera al cumplimiento de la ley que dice que en los espacios públicos gallegos los perros no pueden ir sueltos ni causar molestias a la fauna/personas y punto. El problema de la pesca furtiva ya directamente parece no existir, a pesar del daño causado con la quema de los observatorios (no os quepa duda que han sido ellos).

  Lo peor es que alegar o denunciar no sirve para nada en el caso de Valdoviño. Es como luchar contra molinos de viento. Solos no podemos, por mucho ruido que hagamos. Se queda en eso: ruido. Buscar la unidad de accción con los sectores más civilizados del mundo cinegético/piscícola es muy necesario en ciertos casos.

2 comentarios:

  1. Homes, a cousa estaba fea por problemas del operatividade, pero aleghrome se que finalmente houbera quen se puxera as pilas!!!

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  2. si todo el mundo sabe quienes son entonces os juntais los del pueblo cada uno con un pasamontañas y ropa oscura, os los llevais a la base militar de la Vela y allí les dais las ostias de su vida durante unos días o aún mejor les cortais una mano para que cuando vayan a limpiarse desp de cagar se acuerden de que hacer el hijoputa tiene su precio. seguro que no vuelven.

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