luns, 4 de agosto de 2014

Al borde del mar

    No está uno para muchas palabras estos días. Esperemos que para la próxima conferencia del ciclo de Valdoviño, el viernes de la semana que viene, esté un poco más suelto y animado.

 Esta mañana daba un paseo a media mañana por la costa de Meirás.


   En la costa gallega cada isla, islote o piedra tiene nombre propio. Con tanto pescador de mar, de caña y percebeiro, no es de extrañar que las gentes del mar se conozcan cada metro de litoral como quien habla del centro de Ferrol. Y los islotes de "Os Castelos" son un lugar estupendo para observar aves marinas, donde se ha constatado la invernada, por ejemplo, de Vuelvepiedras (Arenaria interpres) o el raro Correlimos oscuro (Calidris maritima).
  Hoy un grupo de Cormoranes moñudos nidificantes compartían espacio con los grandes no residentes.

Cormoranes moñudos (Phalacrocorax aristotelis)

     Acostumbrados a las Gaviotas patiamarillas urbanitas (tengo un nido prácticamente delante de mi habitación, en un tejado cercano) nos olvidamos que se trata de un ave marina.


   Este ejemplar estaba descansando tranquila. Bostezó ella y casi bostezo yo también (prestaba con ese solete).

Gaviota patiamarilla (Larus michahellis)

  Estos lugares, azotados constantemente por el viento, la lluvia y la salitre no son favorables para la presencia de la fauna reptiliana. Una de las pocas especies capaces de vivir aquí, entre las rocas de esta costa, es la Lagartija de Bocage (Podarcis bocagei). Tiene mucho mérito, os lo aseguro.

 Lagartija de Bocage (Podarcis bocagei), macho

   Desde allí hay una buena panorámica de los impresionantes acantilados situados a caballo de los concellos de Valdoviño y Narón. Hablamos de paredes con más de 200 m, como las del "Monte da vela". ¿Véis ese islote al pie del acantilado en la parte derecha de la foto? Si me dicen que cría allí el Paíño común (Hydrobates pelagicus) me lo creo perfectamente.


      Acabo con una foto que tomé prestada de Internet (no sé el autor, lo siento):

2 comentarios:

  1. Imaxino onde lle quitaches a foto á laghartixa enfronte dos Castelos, que sempre hai un sitio onde se ven un collón delas.
    Por certo, que saibas que nesas laxes se ven con bastante asiduidade seoanei, incluso a horas que non parecen moi propias, case no mediodía.
    Parece incrible que o que non hai nin 100 anos era un área industrial de extracción de tóxicos (arsénico), teña hoxendía esa recuperación.

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    1. Si, a Víbora é outro dos réteis que viven por aqueles tramos costeiros.
      Non coñecía iso do arsénico, pero si que me chamaron a atención eses furados tremendos que penetran ao interior do monte. Sabía que pertenceran a algún tipo de actividade extractiva pero non recordaba exactamente a cal.
      Actualmente é un dos rincóns da comarca polos que máis me gosta pasear. No verán hai bastante domingueiro, pero polo resto vaise de cine, como sabes.

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