Aspecto típico de la Galiza costera
(todo eso que está naciendo no son grelos)
A pesar del profundo cambio del paisaje al Escribano cerillo le va estupendamente ya que parece haberse adaptado bastante a la invasión del eucalipto, siempre que haya buenas extensiones de prado y manchas caducifolias próximas.
Antes (años 80-90) no visitaba la zona de Santa Mariña do Monte, así que no puedo decir si se ha dado un aumento real o no, pero desde luego ahora es un pájaro abundante y fácil de ver en toda la zona. En los diversos atlas publicados (SGHN o SEO) se cita su presencia reproductora sobre todo a partir de unos 500 m en todo el norte peninsular, pero en nuestra comarca aparece ya a partir de unos 300 m o incluso sólo 200 m sobre el nivel del mar. En mi opinión lo suave de nuestro clima durante el verano favorece a estas especies norteñas. Tenemos ejemplos como Anthus spinoletta, Rana temporaria o Iberolacerta monticola, que en otras regiones sólo se encuentran en alta montaña y aquí aparecen prácticamente al nivel del mar o en cotas muy bajas.
Escribano cerillo (Emberiza citrinella)
El Alcaudón dorsirrojo también es muy común en NJ72, aunque su fotografía es complicada dada su timidez. Un ejemplar permitó que me acercase más de los normal al hayarse a contraluz (no es broma, las aves huyen mucho antes si el observador se aproxima con el sol de espaldas).
Alcaudón dorsirrojo (Lanius collurio)
En esta época del año podemos confirmar la cría de muchas aves, ya que hay viajes continuos de los padres con ceba o pollos volantones.
Chochín (Troglodytes troglodytes) volantón
Mirlo común (Turdus merula) con ceba para pollos
Después me acerqué al embalse de As Forcadas.
Embalse de As Forcadas (cola de Vilaboa)
Lo más destacdo fué esta Garza imperial que, como otros ardeidos, se ha vuelto más común durante los pasos. Cualquier día nos dan "un susto".
Imagen sin recorte
Garza imperial (Ardea purpurea) joven
Imagen con recorte
Esperaba encontrarme más libélulas. Apenas un par de Orthetrum cancellatum y, eso sí, muchas Libélulas de cuatro puntos (Libelulla quadrimaculata).
Este odonato es una de esas especies que se aprenden de niño. Su forma y diseño característicos la hacen inconfundible e incluso podemos usar un nombre vulgar bastante lógico. Me hizo mucha ilusión poder tomarle mis primeras fotos, en las que utilicé el enfoque digital hasta 100 o 130x, después de ver los buenos resultados que les daba a Rafa y a Paco. Aunque en la segunda tuve que recortar un poco para corregir el encuadre y ya se nota el efecto pintura. Pero si no recortas mucho (como en la primera) quedan muy bien, la verdad.
Libélula de cuatro puntos (Libelulla quadrimaculata)
Qué agradecida es la Primavera!
Verbo as escribentas, confírmoche que sempre as houbo en abundancia por esa zona de Santa Mariña, e falo precisamente dos anos 80.
ResponderEliminarImaxino que a paisaxe en mosaico que citas é o secreto.
Eu tamén o penso, pero ollo, que falamos de unha especie en concreto de entre as diferentes escribentas que anidan na comarca (e son catro). A Escribenta liñaceira (Emberiza cirlus), por exemplo, sempre foi abondosa na zona toda e substitúe á amarela (Emberiza citrinella) nas comarcas máis litorais.
EliminarPena que non sexan grelos os que están a crecer...
ResponderEliminarA foto da libélula preciosa.
Apertas
Son bichos fotoxénicos a máis non poder, abofé.
EliminarXa borro eu o teu segundo comentario habitual.Xa che pedín que cando comentes desde o móbil ELIMINES os comentarios repetidos Inés.
Desculpas, Xabi. Se non o fixen non foi por desidia, senón porque non vin que me saíra duplicado. E non entendo o motivo. Prestarei máis atención...ou comentarei so cando use o PC.
EliminarEste comentario foi eliminado por un administrador do blog.
ResponderEliminarYo tengo un cerillo criando a menos de 100m del mar, entre Nemiña y Touriñan......
ResponderEliminarImaxino que darías parte no Noticiario ornitolóxico!
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