NOTA: Entrada publicada originalmente el 16/10/2013
Hoy no vamos a hablar de bichos, sino de lugares. De uno muy especial: la "Serra do Xistral".
Esta pequeña y desgastada sierra lucense hace de frontera natural entre las planicies de la Terra Chá y la costa de A Mariña. Sus perfiles son suaves y redondeados, rebasando ligeramente los mil metros de altura. Debido a su situación geográfica posee unas particulares condiciones ecológicas y paisajísticas, que la hacen única en el contexto gallego.
Su territorio ocupa varios ayuntamientos ("concellos"), como son Muras, Vilalba, Abadín, Valadouro, Alfoz,... dependiendo un poco de lo que entendamos por "sierra de O Xistral". Yo nunca he tenido muy claro dónde acaba y donde empieza.
Apenas posee áreas boscosas. Unas pequeñas fragas caducifolias con árboles de pequeño porte (dominadas por Quercus robur, Betula celtiberica o Ilex aquifolium) en algunas laderas y valles de ríos, y repoblaciones de pino (Pinus spp), que tampoco tienen gran desarrollo
Apenas posee áreas boscosas. Unas pequeñas fragas caducifolias con árboles de pequeño porte (dominadas por Quercus robur, Betula celtiberica o Ilex aquifolium) en algunas laderas y valles de ríos, y repoblaciones de pino (Pinus spp), que tampoco tienen gran desarrollo
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Lo más característico de estos montes son sus prados de montaña, sus brezales infinitos y, sobre todo, sus turberas, de las que están representadas varios tipos (alta, baja, cobertor,..). En ellas sobreviven varios taxones animales y vegetales muy escasos, entre las cuales destaca, por supuesto, la amenazada Lagartija de turbera (Zootoca vivipara), lacértido que Manu Arzúa y yo hemos "trabajado" a conciencia por allí.
Son desde luego paisajes espectaculares. Que lo serían más si no hubiese existido la peste de los parques eólicos, que han arrasado estas sierras del norte gallego. He evitado poner fotos de las zonas más afectadas.
Y volando por estos solitarios montes os dejo hasta la próxima entrada.
Lo más característico de estos montes son sus prados de montaña, sus brezales infinitos y, sobre todo, sus turberas, de las que están representadas varios tipos (alta, baja, cobertor,..). En ellas sobreviven varios taxones animales y vegetales muy escasos, entre las cuales destaca, por supuesto, la amenazada Lagartija de turbera (Zootoca vivipara), lacértido que Manu Arzúa y yo hemos "trabajado" a conciencia por allí.
Turbera típica
Son desde luego paisajes espectaculares. Que lo serían más si no hubiese existido la peste de los parques eólicos, que han arrasado estas sierras del norte gallego. He evitado poner fotos de las zonas más afectadas.
Y volando por estos solitarios montes os dejo hasta la próxima entrada.
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