NOTA: Este post está basado en una charla que mantuve el otro día con un viejo cazador, de unos ochenta años, y que no pude incorporar a la entrada que publiqué sobre As Forcadas. Pero aquella
conversa, que decimos en gallego, me pareció digna de compartir. No tomé fotos ni le pregunté el nombre al señor para no romper la espontaneidad. Así que le llamaremos "señor Manolo". Por supuesto la charla tuvo lugar en gallego pero vamos a transcribirla en español (excepto algunas expresiones intraducibles o que conservo para dar mayor fuerza expresiva) en modo de preguntas y respuestas
CONVERSAS CON UN CAZADOR
Es conocido que la gente del campo suele manifestar una actitud muy desconfiada cuando no abiertamente hostil al toparse con el naturalista o con el ecologista. Sin embargo en ocasiones hay paisanos que muestran una reacción más confiada y amistosa, encuentros que suelo aprovechar para echar unas
parrafadas y aprender todo lo que pueda de ellos. Así ocurrió el sábado, cuando me disponía a subir al coche de vuelta para Ferrol, después de pasar la mañana en el embalse de As Forcadas. El señor Manolo, un viejo entrañable con el que había charlado anteriormente se dirigió hacia mí para interesarse por mi jornada naturalista. La conversación fué más o menos como sigue:
Manolo: - ¿Qué, hoy no hay muchos
bichos?
Xabi: - La verdad es que no. En Agosto y Septiembre la cosa estará más animada. Pero estuve fotografiando libélulas
M:- ¿Libélulas? No sé lo que son
X: -
Cabalos do demo.
M: - Ay, sí,
cabalos do demo!. De esos hay muchos. Lo que se ven menos ahora son ranas. Esas cuando hicieron la presa había muchísimas, pero cada vez hay menos.
X: - Cierto. El Cangrejo americano está acabando con ellas y con muchas otras cosas
M: - El cangrejo...Mira que cuando lo soltaron ya se hablaba que iba a causar
moito mal. Pero también se ve menos cangrejo ahora, ¿verdad?. Hace tres años era una peste, que cruzaba la carretera y entraba en las fincas.
X: - También lo he notado, su número ha bajado últimamente por alguna razón que desconozco. Gracias a Dios aquí todavía no ha causado los estragos que causó en otros pantanos de Coruña como Sabón o Cecebre.
M: - Y el Visón. Esos también
fan moito mal.
X: - Ya me dijo la dueña de aquella finca. Estuve hablando con ella el año pasado y me quedé sorprendido cuando me dijo que le mataran... (Manolo no me deja acabar la frase y me interrumpe)
M:- ...un
año!! ("cordero" en gallego),
manda carallo!.
X:- ¿No sería el
raposo? (él niega rotundo con la cabeza)
M: - La que es muy bonita pero
non fai mal es la nutria. Qué bonitas son! El otro día había una comiendo un cangrejo cerca de aquí. Pero lo que hay mucho es Jabalí. Buff..
X:- Ya he visto que este año estáis cerrando todas las fincas con pastor eléctrico y alambrada
M: - Es que pasas un año trabajando y en una noche te
estragan todo la cosecha. Eso había que controlarlo de alguna manera.
X:- Estoy de acuerdo. Además de los daños en vuestras fincas de maíz o patatas también son un problema ecológico que afecta a las aves acuáticas nidificantes o a los anfibios, por ejemplo. Por lo menos comen también muchos cangrejos.
M:-
Carallo se non! Tienen la ribeira toda fozada,
buscando neles.
X:- Pues si encuentra las cagadas de Jabalí fíjese en el color rojo y los restos de caparazón.
M:- (Asombrado) ¿No me digas eso? Es que come de todo el jabalí... pero hay demasiados...
M:- (Manolo se pone serio). Es que yo soy
cazador, ¿sabes? Bueno, ahora voy poco porque estoy mayor. Más que nada para estar con la gente. Estoy en el coto de Valdoviño.
X:- ¿En el de Valdoviño? Allí conozco a "José o cazador", compañero de Bazán.
M:- Ay,
neno, ya me doy cuenta. Esos andan a la Becada.
X:- Me dice siempre que es la caza más bonita de todas, por lo difícil del tiro, por el rastro... y por la carne, que cuentan que sabe a gloria.
M:- Yo nunca probé la becada. Pero tomé un día una paella de
Pombo (paloma torcaz), que estaba muy buena. Una carne muy tierna.
X:- En Zamora me dijo un cazador que la carne de
pombo era más blanda que la del
pombo pequeno (paloma zurita), que había que cocer horas y horas para que ablandase. Imagino que no conoce el
pombo pequeno, pues por aquí son muy raros.
M:- Ay, sí, conozco. Antes venía algún
pombo pequeno en invierno. Eran más pequeños que el de aquí y más bonito. Entraban con los bandos de
pombo. Pero ahora ya no se ven. Igual que la perdiz. Mira que se daba bien la perdiz en el Monte Agudo.
X:- Conozco el monte. Ahora esta lleno de eucaliptos.
M:- Donde hay eucalipto no hay nada. Antes allí había mucha perdiz, pero ahora no tienen que comer. Por cierto que hace poco se juntaron más de cien
pombos en el trigal que hay cerca de donde tienes el coche aparcado. Nos avisaron del coto que dieran permiso para cazarlos pero al final no fui.
Y este año tuvimos codorniz aquí mismo.
X:- Lo sé. Las escuché cantar hace quince días. En mi aldea las llaman
paspallás.
M: - Eso,
pantallá, aquí las llamamos
pantallá, porque canta así. Pero no debió de haber más de una pareja, porque cuando canta un macho contesta el otro. Y esta cantaba sola.
X:- Es que ahora ya no tenéis caza menor. Por lo que veo todos van al Corzo o al Jabalí y sé que es una caza complicada. Hay que juntar una cuadrilla grande y organizarse. Luego están los perros, que muchos acaban heridos en las batidas, ¿no?.
M:- Lo peor es la gente joven, que no tiene paciencia. Si te ponen en un puesto tienes que quedarte en él, coño. Pero los chavales lo abandonan porque se aburren y quieren disparar ellos. Eso es un peligro porque a veces te encuentras con la pieza donde menos lo esperas. Hay que estar en los puestos hasta que te lo digan!
X:- Nunca hubo mucho conejo por aquí, claro.
M:- No, conejo no. Aquí era tierra de liebre. Qué bien se daba!
X:- ¿En los altos de Santa Mariña do Monte, por ejemplo?
M:- Ahí sobre todo. Antes se plantaba centeno, trigo, había prado...
X:- Perdone, que estaba mirando con los prismáticos para unos
cirrios.
M:- El otro día había en mi casa un
Roiseñor de esos (se refiere al Camachuelo)
X:- ¿Roiseñor? Conozco varios tipos. ¿A cual se refiere?
M:- A uno que es precioso. El macho es todo rojo, pero la hembra es más acastañada, como la del
Pimpín.. Es el pájaro más bonito de todos. En mi casa también tengo la
campaíña. Es uno muy pequeñito, blanco y negro, que cría siempre en las paredes (deduzco que se trata del Carbonero garrapinos. El señor desea seguir hablando pero yo me tenía que ir)
X:- Bueno, me ha encantado la conversación pero debo marchar. Ya volveremos a hablar en otro momento.
M:- Venga. Yo sigo de paseo.
Y allí quedó el viejo cazador, paseando y recordando con nostalgia como era Vilaboa antes de la construcción del embalse y cómo eran aquellos montes antes de la eucaliptización, la gran tragedia ecológica de nuestro tiempo.
PD: Por aportar alguna imagen al texto he añadido la cubierta de uno de los libros más conocidos de mi amigo José Curt porque viene como anillo al dedo a esta
conversa.