Ya os he contado que aquí tenemos uno de los entornos de mosaico agropecuario mejor conservados de la comarca de Ferrol. Junto a las extensiones de prados y cultivos de cereal, donde abundan los setos vivos, aparecen numerosas huertas con frutales como nogales, higueras, o guindales, que son muy atractivos para las aves. Ademas se conservan muchas casas construidas con materiales tradicionales, algunas de ellas abandonadas (aviso para amantes de quirópteros y rapaces nocturnas).
Paisajes del valle del Xubia en Moeche (A Coruña)
Además el río Xubia aporta su clásico bosque de galería, lo que enriquece aún más la diversidad ecológica del valle. Vamos, el mejor sitio de la comarca para observar aves terrestres con mucha diferencia, en mi opinión.
Esperemos que no lo destrocen. Por ahora las repoblaciones forestales que se han hecho han apostado por el Chopo que, aunque no es autóctono de la zona, genera hábitats muy interesantes. Esperemos que siga así y que no empiecen a plantar el "innombrable". Esta parcela que hoy estaba roturada y preparada para algo daba mal rollo. Malo será.
Y justo en los bordes de un pequeño riachuelo que pasa por allí, lograba observar y fotografiar malamente (algo desenfocada), una Comadreja (Mustela nivalis). 25 años sin ver un ejemplar vivo en la comarca hablan por si solos del declive alarmante de la especie.
Comadreja (Mustela nivalis)
Curiosamente, esta misma tarde mi cuñado me comentaba que también había visto hoy otra "Delonciña" en A Pallota, Santa Icía (Ferrol). Esta casualidad me hace pensar que estamos en días favorables para ver Comadrejas activas. A ver si hay suerte y logro una foto mejor.
Para mí fué un subidón de adrenalina volver a ver a uno de nuestros carnívoros más famosos. El entorno de vega fluvial (con junqueras de Typha y Juncus sp) y de prado húmedo favorece la presencia de sus presas favoritas, como son los micrótidos.
De aves, pues más o menos la mañana resultó fecunda. Fallaron algunas especies que parecen haber desaparecido definitivamente del valle (Triguero, Escribano cerillo, Bisbita arbóreo, Aguilucho cenizo,...), algo a lo que lamentablemente estamos acostumbrándonos en todas partes. Pero saqué un buen número de especies detectadas, muchas con confirmación de cría
Zorzal charlo (Turdus viscivorus)
En un joven maizal pude afotar, aunque lejos, a dos de nuestras aves más desconfiadas y tímidas: el Zorzal charlo (Turdus viscivorus) y el Arrendajo (Garrulus glandarius).
Arrendajo (Garrulus glandarius)
Los preciosos Alcaudones dorsirrojos (Lanius collurio) cuentan con una buena población en todo el valle.
Alcaudón dorsirrojo (Lanius collurio), macho
También había Tórtolas comunes (Streptopelia turtur) e incluso apareció un joven Cuco (Cuculus canorus). Pero con los Cucos y Críalos hay que tener cuidado, pues realizan unas migraciones muy tempranas. Este ejemplar de hoy pudo haber nacido en O Xistral, A Capela o Francia, yo que sé...
Pongo una foto que me pasó Pepe Vidal el otro día de un joven Cuco avistado cerca de Pantín (por certo, vaia fotón, Pepe!!)
Cuco (Cuculus canorus) joven. Foto José Vidal Meilán
Lo mejor de la jornada fué la escucha de un macho cantor de Buscarla pintoja (Locustella naevia). En este valle he registrado históricamente presencia de la especie en época reproductora, pero en los últimos diez años no la daba pillado. Pongo una foto tomada hace un par de años en Taraza con mi anterior cámara (Fuji HS10)
Buscarla pintoja (Locustella naevia)
La Buscarla tiene algo de reptil. No ya su conducta y su manera de moverse entre la vegetación herbácea. Es que es una de las pocas aves que muestra una detectabilidad extraordinariamente variable. Me explico.
En lugares abiertos y fáciles visualmente, como son prados, cultivos y demás, resulta difícil pasar por alto un paseriforme que críe allí si realizamos un número mínimo de visitas. Pero la Buscarla exige por parte del observador una perseverancia y una paciencia que es más propia de herpetólogos que de ornitólogos (que nadie se me moleste porfa).
Durante los años ochenta y noventa escuché y observé esta especie muchas veces en el valle de Moeche para, en la década de 2000, perderle la pista completamente. Ahora, ha decidido volver a salir en portada. Y esto, teniendo en cuenta que no se han producido cambios en su hábitat, me hace pensar que, simplemente, es un ave de una detectabilidad inusualmente compleja (por iso che dicía aquilo da que virades en Rinlo, Óscar)
En fin, que esta ave me trae loquito, loquito . Me recuerda a alguien que muestra un comportamiento igualmente imprevisible...
Cambiamos de tema (ejem). Y fué pillar el Atlas de Coleópteros el viernes y encontrarme con este personaje medio aturdido en el camino:
Escarabajo pelotero (Geotrupes stercorarius/puncticollis)
Este escarabajo tiene la costumbre de excavar galerías bajo los excrementos de vaca y recoger pedazos de ellos, que entierra para criar. Sin duda que habrán leído los textos de Ayurveda que nos informan de las propiedades antisépticas de los excrementos de vaca (hablo en serio). De otra manera no se entiende esta "poco higiénica" biología reproductiva (y ahora hablo en broma).
Como suele pasar con los escarabajos de esta familia, los ácaros cubrían su cuerpo. Cuando ves un pequeño invertebrado que, a su vez, es "hábitat" para otra microfauna parasitaria más pequeña aún, comprendes la complejidad de la madre Naturaleza.