Sin duda que el concepto de "sufrimiento" supera su mero significado semántico. No hay quizá otro término relacionado con el ser humano que sea más relativo y subjetivo. Sin entrar en valoraciones filosóficas o espirituales sobre su origen, estoy seguro que todos estaréis de acuerdo en ello.
Existen personas extraordinarias que son capaces de soportar con enorme entereza su vida en un campo de refugiados de la franja de Gaza, en una mina de diamantes de África, o simplemente la incertidumbre de no saber como van a llegar a fin de mes con una boca que alimentar. Pero hay otras muchas que se desmoronan por algo tan banal como no poder salir un viernes por la noche en una ciudad gallega o porque no pueden comprarse ropa nueva en un centro comercial cada mes (estas cosas me producen auténticas ganas de vomitar).
El hecho es que no corren buenos tiempos para este que escribe. Después de una semana terrible durante la cual dormir cuatro horas seguidas se convertía en todo un desafío, esta noche batía mi propio "record personal", al permanecer toda la noche sin poder encontrarme con Morfeo debido al estrés acumulado.
Pero seguimos en pie. Claro que sí! En cuanto recupere fuerzas vamos a ver una entrada muy especial de nuestros amigos alados favoritos.
Coming soon...
Mucho ánimo Xabi.
ResponderEliminarQue esas cosas que te atormentan pasen pronto sin dejar rastro.
Apertas
Pois moito me temo que dúas desas cousas non só non van a pasar senón que probablemente van ir a pior co paso doas anos. O terceiro problema igual ata ten final feliz e todo.
EliminarGrazas Jandro.
Mi joven amigo y compañero: No es que el dolor sea bueno ni conveniente. Quien así lo afirme es que tiene cierto parentesco con el marqués de Sade (por cierto, una de las plumas más tiernas y delicadas de la literatura, a pesar de su temática). Pero sí es cierto que el dolor es un inevitable compañero de viaje que jamás abdica de nuestro camino. Dicho de otra manera: no tenemos más remedio que convivir con él. Lo que si que ocurre es que de estas crisis terribles, aunque no lo parezca, solemos salir fortalecidos espiritualmente. Seguramente el australopiteco se hizo humano con su primer llanto. En fin, que yo quería mandarte, desde mis muchos años, un fuerte abrazo y, aunque te sirva de poco consuelo, hacerte llegar el convencimiento de que todo pasa y que, lo que parecía insoportable, se va viendo de otro color con el paso del tiempo. Mientras, ahí tienes Valdoviño y muchos amigos que te quieren y admiran. No todos poseen tal patrimonio. Ánimo, pues. Josele
ResponderEliminarE con palabras así, aínda se fai todo máis levadeiro. Dín os cristianos que Deus fixo o mundo en seis días e o séptimo descansou. Mentira cochina. O séptimo día aburríase e estimou conveniente que algúns dos seus naturalistas máis queridos se dedicasen a escribir para alegría dos seus lectores, e lles puxo nomes: José Curt e Gerald Durrel (D.E.P.).
EliminarUn abrazo.
Ânimo amigo!!!!
ResponderEliminarObrigado Paulo.
EliminarAbraços.
Xa sei que so son palabras, pero de todo o malo sae sempre algo bo, e seguro que saes fortalecido. Animo e apertas,
ResponderEliminarInes
Graciñas "mamá" ;)
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