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sábado, 18 de maio de 2024

17/05/2024 Seguimos con el plan "Mustela 2024"

  El viernes ha sido festivo en Galiza por ser Día de las Letras Gallegas, otra "especie" en peligro de extinción (este blog es seguido por muchos lectores de otros territorios del Estado y por eso empleo el español en muchas entradas pero fuera de ese espacio internacional que supone Internet soy gallego-hablante). Por ser día no laboral tuve oportunidad de volver a mis queridos campos de Moeche, donde me recibió un clima 100% gallego, como no podía ser menos:

"Esperando a que pare de llover". Óleo sobre lienzo de estilo modernista

   Una lluvia moderada y persistente me fastidió la primera hora del muestreo. Con paraguas se puede pajarear, por supuesto, pero el ruido de las gotas al caer sobre la tela dificulta la escucha de los cantos. Si además vas anotando las citas en el móvil mientras intentas que no se te mojen los prismáticos y la cámara con teleobjetivo, pues casi pareces el clásico hombre orquesta de las películas.

En el "observatorio" 

 Precisamente por ir con tanto pertrecho no pude tomar alguna foto decente a uno de los jabalíes más imponentes que he visto en mi vida, y llevo unos cuantos, como todo ferrolano. Únicamente pude disparar cuando el bicho se alejaba bajo la lluvia.

Jabalí (Sus scrofa), foto testimonial

  Un zorro pasó más lejos aún. La foto vale para la cita y poco más. Por mi experiencia de campo, mayo es el mes en que resulta más fácil la observación de zorros activos durante el día.

Zorro (Vulpes vulpes) caminando por la carretera

  Entre las 8,00 y las 8,30 h la lluvia me dio una pequeña tregua, para luego volver a diluviar. Aproveché para completar el recorrido habitual hasta Penasalbas.


  En el hueco de una estaca de madera había criado antes una pareja de herrerillos (pincha). Por lo visto el piso ha cambiado de inquilinos:

Carbonero común (Parus major) portando ceba para pollos

Una pareja de carboneros comunes entraba con orugas de mariposa al agujero para cebar a los pollos.


Carbonero común (Parus major) saliendo del nido

  El zorzal charlo es reproductor común en montes de la zona pero resulta más raro de de ver en los campos de abajo. Ayer había un par de ellos. Igual eran los primeros volantones del año aunque en las fotos parecen adultos.

Zorzal charlo (Turdus viscivorus)

   Con tiempo lluvioso es complicado controlar alcaudones. Sólo pude detectar una pareja y un macho. Pero las fotos con lluvia quedan muy bonitas, eso sí.

Alcaudón dorsirrojo (Lanius collurio). Imagen recortada, editada con reducción de ruido inteligente
OM-1 + Zuiko 100-400 mm   ISO:3200    V:1/200    F:6,3

Alcaudón dorsirrojo (Lanius collurio)
OM-1 + Zuiko 100-400 mm   ISO:3200    V:1/200    F:6,3
 
    El resultado del muestreo en cuanto a mustélidos fue cero (cero es un resultado, dice la ciencia). Álvaro Pérez tuvo más suerte mientras controlaba alcaudones en Cedeira. Una marta salió a su encuentro y pudo tomar estas fotos tan chulas, que comparto en Bichos.

Marta (Martes martes). Foto. Álvaro Pérez
Panasonic DZ-FZ82 (focal 660 mm equiv.)  ISO:2000   V:1/200   F:5,6

 Sensibilidades de ISO 2000 o 3200 en la OM-1 casi son rangos medios pero para el sensor 1/2,3" de una Panasoniz FZ82 es muchísimo. Aún así Álvaro ha logrado unas fotos más que dignas de este carnívoro tan común ahora en nuestra comarca (quién nos lo diría hace treinta o cuarenta años!).

Marta (Martes martes). Foto. Álvaro Pérez
Panasonic DZ-FZ82 (focal 830 mm equiv)   ISO:3200   V:1/200   F:5,6

   Y ahora a ver si va parando de llover, que ya toca, mecagoenlamar...

2 comentarios:

  1. Ver esta marta a escasos metros e durante uns cinco minutos foi certamente toda unha experiencia. Por cousas coma esta merece ben a pena erguerse cedo...

    Moita sorte coa busca das Mustela!

    Álvaro

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    Respostas
    1. Opa, Álvaro.

      Sempre paga a pena madrugar, alomenos se queremos traballar mamíferos e aves. Con respeito aos mustélidos "diurnos" (martaraña, lontra, armiño, delonciña...) adoitan ser moi colaboradores co fotógrafo, nada que ver cun raposo, por exemplo (en canto te ve escapa correndo). En maio de 1986, tiven a inmensa fortuna de avistar un armiño que xa vira a a semana anterior, mentras camiñaba polo paseo da Frouseira. Lera que eran bichos moi curiosos así que comecei a asubiar e facer sons agudos por ver como reaccionaba. O armiño non só non escapou senón que mesmo se acercara a min. Mágoa non ter cámara daquela. Esas fotos hoxendía valerían unha fortuna, ecolóxicamente falando.
      Un abrazo, Álvaro.

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