Definitivamente el mundo se va a la mierda. Que alguien me explique dónde está la razón, la sensatez o la lógica en este caso insólito que acabo de leer en prensa.
Por la foto vemos que se trata de sapos comunes (Bufo spinosus), un anfibio muy común en la Península pero que tiene graves problemas de conservación en muchos lugares: atropellos masivos durante la época de celo, predación por especies invasoras, enfermedades como el ranavirus o la mosca parásita, etc.
Un pobre agricultor ha matado 25 sapos por poner un pastor eléctrico para que su ganado no escape a la carretera. Me apenan esos sapos, obviamente, pero que un gobierno decida multar a ese hombre con UN MILLÓN DE PESETAS (así se entiende mejor) es un escándalo incomprensible que sólo podemos comprender por la infección animalista que ya ha contaminado para siempre a nuestra sociedad. Y habrá ecologistas que aplaudan la decisión.
En fin, avergonzado por la parte que me toca, sigo alucinando con esta noticia, que parece más propia de El Jueves que de la prensa oficial. Y menos mal que no electrocutó a un gato o un perro (supongo que pedirían la perpetua no revisable).
E así tódolos días...
ResponderEliminarÉ verdade que noticias deste tipo forman parte das lendas urbanas. Pero pra que a lenda urbana sexa crible, ten que ter algho de veracidade.
A xente identifica axentes ambientais con elementos sancionadores, non con tipos ós que ter informados pra que faghan o seu traballo. Así non imos ben...
Alucinante, el pobre señor mirando por lo suyo y multazo que te crío, como si lo hubiera hecho para cargarse a unos sapos. Los ganaderos del Pirineo en pie de guerra, no me extraña, no quedará ahí el tema.
ResponderEliminarMientras tanto, la peste mascoteira mandando en cualquier lugar, los 365 días del año y las 24 horas del día. Desde Doniños hasta Pantín, en Ferrolterra, en Galicia y en toda España. A los miserables que sueltan perros en espacios protegidos (arrinconado a los animales salvajes) o en cualquier lugar público, CERO multas, les sale gratis, por eso los malnacidos hacen lo que les da la gana. Así estamos como estamos...